El acondicionador se utiliza para hidratar el cabello después del Shampoo.
Su fórmula ligera permite que se aplique siempre que se lave el cabello.
Este producto es fundamental para mantener sana la fibra capilar ante las agresiones diarias, ayuda a evitar el frizz y deja el cabello mucho más suave y brillante.
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Hidratación:
Repone la humedad perdida por el cabello durante el lavado, dejando el cabello suave y flexible.
Suavidad:
Suaviza la cutícula capilar, haciendo que el cabello sea más fácil de peinar y desenredar.
Brillo:
Sella la cutícula, lo que ayuda a reflejar la luz y a que el cabello luzca más brillante.
Facilidad de peinado:
Ayuda a desenredar el cabello, reduciendo la fricción y el daño causado por el peinado, y facilitando la creación de estilos.
Reducción del encrespamiento:
Ayuda a controlar el encrespamiento al sellar la cutícula y reducir la fricción entre los filamentos capilares.
Protección contra la rotura:
Al facilitar el desenredado, ayuda a prevenir la rotura del cabello, especialmente cuando está húmedo.
Protección térmica:
Ayuda a proteger el cabello del daño causado por herramientas térmicas como secadoras y planchas.